Si observas el Ramadán y eres empleado de una empresa u organización, aquí encontrarás algunos consejos útiles para ti y tus empleadores sobre cómo trabajar durante el Ramadán.
- Determina cuándo es el Ramadán y si esto podría afectarte en el trabajo.
- Asegúrate de que todas las personas con las que trabaja comprendan lo que implica el Ramadán y el ayuno y cómo podrían afectarte. Ayunar durante muchas horas, a menudo 17 horas al día, no es fácil, y tus colegas necesitan saber cómo podría afectar tu comportamiento y tus prácticas laborales.
- Si el trabajo por turnos es la norma, ve si se puede hacer algún cambio para ofrecerte la oportunidad de intercambiar turnos o cambiar tus horas de trabajo de una manera que funcione para ti y tus colegas que no observan el Ramadán.
- Si trabajas de 9 a 5, considera flexibilizar tus horarios de inicio y finalización. Ve si puedes trabajar durante las horas de almuerzo y descansos a cambio de terminar más temprano.
- Si no te sientes cómodo sentado y viendo a la gente comer y beber, no te sientas obligado a aceptar invitaciones de colegas a reuniones de trabajo y fiestas que suceden durante tus horas de ayuno. Está completamente bien decir "No".
- Discuta con tu empleador la opción de tomar un descanso al atardecer para romper el ayuno si todavía estás de turno. Esto debería darte suficiente tiempo para romper el ayuno, orar y comer adecuadamente más tarde.
- Intenta de tener tus reuniones por la mañana si necesitas un alto nivel de concentración. La gente suele estar relativamente fresca por la mañana.
Por último, si planeas tomarte un tiempo libre para celebrar el Eid, habla con tu empleador con anticipación.